Las
personas mayores que viven solas, pueden acceder a una serie de servicios
sociales para evitar la institucionalización. Tal es el caso del servicio de
teleasistencia. Las personas a las que el servicio de ayuda a domicilio
atiende, están condicionadas por alguna pérdida o disminución de sus
capacidades funcionales, para el desenvolvimiento de una o varias actividades
básicas, o instrumentales de la vida diaria, que antes realizaban con
normalidad.
Con
el objeto de mantener al usuario en su medio y potenciar su autonomía, se
articulan una serie de prestaciones complementarias del Servicio de Ayuda a
Domicilio,
La
teleasistencia es un servicio de apoyo que se presta en el domicilio para dar
atención a personas en situaciones de emergencia sanitaria y social, o
cualquier otra prevista dentro del servicio. Va dirigido a las personas mayores
de 60 años, y a personas discapacitadas de cualquier edad que se encuentren
en una situación socio-sanitaria de riesgo derivada de su discapacidad,
enfermedad, soledad, aislamiento, o situación social.
Para
la prestación de este servicio se instala un terminal y un pulsador conectados
a la línea telefónica y a la corriente eléctrica. Mediante
este equipamiento la persona puede realizar una llamada al centro de atención
desde cualquier lugar del domicilio y en cualquier momento, pulsando el botón
rojo del terminal, o de la pulsera o colgante que se recomienda llevar siempre
puesto.
La
llamada se recibe en el centro de atención y es atendida por personal
específicamente preparado para dar una respuesta apropiada a cada situación. En
ese momento se inicia la comunicación sin tener que descolgar el auricular del
teléfono. La
comunicación así establecida, a través del dispositivo de teleasistencia, solo
se puede cortar desde el centro de atención y nunca desde el domicilio de la
persona usuaria.
El
servicio de teleasistencia se presta 24 horas al día, 365 al año y ofrece:
- Atención ante situaciones de emergencia,
en las que se puede encontrar la persona usuaria (sanitarias o de otro tipo:
fuego en el domicilio, robos, etc.)
- Atención ante situaciones de necesidad
social (soledad y angustia, solicitud de información, caídas sin lesión, etc.).
- Atención ante situaciones de urgencia y
siempre que no haya apoyo social o familiar: recogida de medicinas, entrega de
comida a domicilio y acompañamiento al médico.
- Movilización en los casos necesarios, de
las personas de referencia (familiares, vecinos y otros contactos), de una
unidad móvil o de los recursos existentes en la comunidad (ambulancias, bomberos, policia, etc.).
- Realización de llamadas de seguimiento
periódicas y puntuales desde la central para recordar actividades concretas:
consultas médicas, ingesta de medicamentos, realización de gestiones, etc.
- Atención, intervención y apoyo social.
- Información sobre los recursos sociales
existentes (centros de día, residencias, servicio de acompañamiento, servicio
de ayuda a domicilio, etc.) y derivación y apoyo en su gestión.
- Información a los familiares y personas
de referencia sobre las actuaciones relevantes realizadas.