lunes, 2 de abril de 2012

Funciones de la auxiliar domiciliaria con las personas mayores

Funciones de la auxiliar domiciliaria con las personas mayores

Las personas mayores, a veces muestran resistencia para recibir en su casa la ayuda domiciliaria, tienen miedo a la pérdida de intimidad, sobre todo las mujeres, que han tenido el rol de ama de casa, y pueden sentirse desplazadas. Por otra parte, los hombres aceptan mejor la ayuda, al reconocer que no son capaces de realizar los trabajos del hogar. (Zerbitzuan, 41 - Junio 2007, 167-168 p.)

Para empezar, hay que explicar que las auxiliares del SAD no son asistentas o chicas de la limpieza, o empleadas del hogar, aunque realice también estas tareas domésticas, hay que tener en cuenta que no deben realizar tareas peligrosas que entrañen peligros, ni fregar portales, ni escaleras.

Las auxiliares, ayudan a la persona mayor, en la realización de las actividades de la vida diaria, y también en las instrumentales, como realizar gestiones, pasear, etc.

Las tareas que realiza la auxiliar domiciliaria van desde las tareas domésticas y de cuidado personal, hasta apoyo en la vida social y relacional, pasando incluso por cuidados especiales.

La primera de las funciones a cumplir por los trabajadores/as del SAD es hacer las tareas encomendadas. Sin embargo, no son las únicas tareas a desarrollar. Cuando alguien entra en una casa y por ejemplo, está ayudando a otra persona a vestirse, comer, lavarse, andar, se entra en un contacto íntimo que da ocasión para observar o prevenir las consecuencias de la evolución del deterioro originado por una enfermedad o discapacidad. Estar atentos a lo que pasa en el entorno próximo de la persona será algo indispensable para realizar otras funciones como son formar, prevenir, reaccionar ante casos de urgencia, y trasladar los cambios observados.

A) Formar o enseñar

Mientras la auxiliar realiza las tareas encomendadas, también es necesario que enseñe a la persona mayor a hacerlo por sí misma o con ayuda. Es decir “hacerlo con ella”, no “hacerlo en su lugar” realizando una función educativa, para que la persona mayor aprenda aquello que no sabía o que le costaba realizar por sí misma. Por ejemplo, vestirse salvando dificultades, lavarse la espalda con ayuda de cepillos especiales, cocinar de manera sencilla, etc.

B) Prevenir

Además de realizar las tareas, se observara al anciano y a su familia, para aumentar su calidad de vida y su bienestar, en aspectos como: mejorar los hábitos de salud de la persona mayor, para el mantenimiento de una buena higiene, una variada alimentación, el mantenimiento de una buena hidratación, la realización de ejercicios físicos saludables, y erradicar hábitos nocivos como alcohol y tabaco.

C) Orientar a la persona mayor y a su familia sobre las revisiones médicas, el control periódico de consultas para los distintos especialistas.

D) Asesorar a la persona mayor, sobre actividades recreativas y de ocio para mejorar sus relaciones sociales.

E) Fortalecer las relaciones afectivas y contactos familiares, amigos y vecinos.

F) Reaccionar ante casos de urgencia, teniendo reflejos y actuando rápidamente, ante algunas situaciones como: accidentes domésticos, caídas, quemaduras, intoxicaciones, cortes, avisando en caso de urgencia a los familiares y al servicio médico y a la coordinadora de la empresa o trabajadora social encargada del caso.